SIN POSIBILIDAD

Imagen: FÉLIX GIRARD

Pensó en una canción de cuna para dormir arrullado, escapando de las leyes, de los confines donde reside la furia y de las condenas feroces. La tormenta se alejaba llevándose tras ella todos los estrépitos y una bandera húmeda que nunca lo condujo hacia la libertad.

Está soñando.

Pretende sujetar las olas desde un velero que cuelga de cables invisibles. Tiembla ante la música violenta que atraviesa el viento y como si la tierra no existiera, navega al son de su propia voz, que marca los tiempos de playas difusas.

Abandona el esplendor de sus propios movimientos cuando siente la fuerza de un rumbo nuevo. Canta al son alegre de piratas desconocidos. Siente todo el azul que se concentra en el mar y alza sus brazos hasta tocar la plata del valioso tesoro que regenta la luna.

Estalla un cañón imaginario.

Despierta.

Entonces comenzó a temer su propia suerte. Vio por televisión cómo una banda tocaba en un espacio urbano. Imposible escribir derecho. En solo un segundo dejó de ser capitán y volvió a conocer a todos sus enemigos.

Uno por uno.

Sin ninguna posibilidad de volar cambió de postura y desde ese colchón gastado trató de alcanzar una llama ficticia...

Gemidos entrecortados...

De nuevo silencio...

La vela se apagó...